Intimidad es entrar a la tristeza de alguien que está solo y, tan sólo está que deja la puerta entornada para que vos entres sin pedir permiso para espiar su dolor.
Tristeza es escuchar que los brazos de ese alguien se mueren por abrazar, pero no hay llama, no hay nafta para que esos brazos se eleven para llegar a tocarte y así, concretar el abrazo.
Cuando no hay llama, sucede que hay un gris permanente en los ojos de ese alguien... un gris que no se borra ni mirando al sol de frente en un día re soleado.
Gris es el color que adquiere el alma de alguien que se fue a dormir, mientras la vida lo necesitaba despierto.
El alma de alguien se duerme cuando la sangre de sus venas deja de encontrar un por qué o para qué en cada bombeo que le dedica al resto del cuerpo.
Quiero ayudarte. No sé cómo se hace. No sé si me corresponde ser quien te ayude. Quiero ayudarte. Tu tristeza, mi tristeza. Somos lo mismo. No duermo bien, si vos dormís mal. Quiero ser vos para despertarte desde adentro.